El diseñador estadounidense Willy Chavarría pidió disculpas tras la polémica generada por un calzado creado en colaboración con Adidas Originals, el modelo “Oaxaca Slip-On”, que se inspiró en los tradicionales huaraches de cuero elaborados por artesanos indígenas de México. La controversia se centra en la acusación de apropiación cultural, debido a que el diseño se produjo sin consultar ni dar crédito a las comunidades originarias.
La respuesta de las autoridades mexicanas y la opinión de Adidas
La mandataria de México, Claudia Sheinbaum, expresó su opinión en público sobre este asunto, indicando que “las corporaciones importantes frecuentemente se apropian de productos, conceptos y diseños de las comunidades indígenas”. Esta afirmación destaca un debate más amplio acerca del reconocimiento y respeto hacia las tradiciones artesanales de los pueblos originarios. A su vez, la subsecretaria de Cultura de México, Marina Núñez, comentó que Adidas se acercó a las autoridades oaxaqueñas para analizar posibles acciones de restitución a las personas afectadas por la fabricación del calzado.
Adidas emitió un comunicado en el que reconoció la riqueza cultural de las comunidades indígenas de México y aseguró que el modelo “Oaxaca Slip-On” se inspiró en la tradición artesanal de Villa Hidalgo Yalálag. La marca reafirmó su compromiso de entablar un diálogo respetuoso con la comunidad para honrar su legado cultural, al tiempo que retiró las imágenes promocionales del calzado de sus cuentas en redes sociales y las de Chavarría.
La disculpa pública de Willy Chavarría
Willy Chavarría ofreció una disculpa pública, asegurando que su intención original era rendir homenaje al espíritu cultural y artístico de Oaxaca y sus comunidades. En su declaración, enfatizó que el nombre “Oaxaca” representa no solo un lugar, sino una cultura viva con historia y gente que merece respeto. Chavarría admitió que no trabajar directamente con la comunidad oaxaqueña durante el proceso creativo fue un error y que su acción no reflejó la colaboración y respeto que estas comunidades merecen.
El diseñador, quien fue vicepresidente sénior de diseño de Calvin Klein hasta 2024 y actualmente dirige su propia marca homónima, reconoció que “el amor no se da, se gana con la acción”, subrayando la importancia de gestos concretos para reparar el daño cultural causado.
Información sobre la asimilación cultural
La adopción cultural indebida se refiere a la utilización no autorizada o incorrecta de tradiciones, prácticas o conceptos de una comunidad por individuos de una sociedad que habitualmente tiene más poder. En esta ocasión, la polémica apareció debido a que el modelo «Oaxaca Slip-On» se produjo en China sin la participación de los artesanos creadores del diseño original. Especialistas en cultura y derechos colectivos han indicado que este tipo de casos infringe la propiedad intelectual no tangible de las comunidades originarias y puede perjudicar su retribución tanto económica como cultural.
Acciones y conversación hacia el resarcimiento
Adidas ha solicitado reuniones con las autoridades mexicanas y la comunidad de Villa Hidalgo Yalálag para discutir formas de reparar el daño y establecer una colaboración directa que respete la tradición artesanal. Entre las acciones planteadas se encuentra la posibilidad de reconocer la autoría del diseño, apoyar a los artesanos locales y garantizar que futuros productos derivados de estas tradiciones cuenten con la participación activa de la comunidad.
Implicaciones para la industria de la moda
Este ejemplo muestra un problema cada vez más común en el sector de la moda: lograr un balance entre la inspiración cultural y la ética, además de fomentar una colaboración respetuosa con las comunidades de donde surgen los diseños. La polémica en torno al “Oaxaca Slip-On” destaca la importancia de que las marcas globales implementen prácticas de diseño que sean responsables y que no solo valoren la tradición, sino que también ofrezcan beneficios a las comunidades participantes.
En búsqueda de un diseño cooperativo y considerado
La polémica generada por el modelo “Oaxaca Slip-On” evidencia la tensión entre creatividad comercial y respeto cultural. Las disculpas de Willy Chavarría y la respuesta de Adidas muestran un primer paso hacia la reparación, mientras la comunidad oaxaqueña y las autoridades mexicanas evalúan las acciones que garanticen un reconocimiento justo de su patrimonio artesanal. Este caso se convierte en un referente sobre la importancia de la colaboración ética en la moda internacional y el valor de respetar la riqueza cultural de las comunidades originarias.